martes, 17 de abril de 2012

Para Arturo

Cuando me entere de ti
supe que no tropezaría más.

Tu alma es tan blanca como la espuma del mar,
solo quiero besarte y no dejarte de mirar.

Conocerte no fue una simple casualidad.
Estamos embriagados en  el extasis de nuestro
destino tan  desconocido.

Mis labios te reclaman,
estamos bañados de espuma marina

Tus ojos además de su hermosa presencia,
me susurra cosas que quisiera yo entender.

Pronosticar el futuro no es tarea sencilla,
por eso tapo mis ojos con tus manos
para solo verte a ti.
Quiero conocer cada linea que se marca en tu rostro al sonreír.
Provocas que imagine  más  cosas
que los demás persuaden de ti.

Tu alma es tan blanca como la espuma del mar,
       solo quiero besarte y no dejarte de mirar.